Samsung Galaxy Tab S6, análisis: así es la tablet más ambiciosa y completa de Samsung para este 2019
La firma coreana ha optado por vestir con un diseño cuidado a la hornada de tablets de 2019 –
la «humilde» Samsung Galaxy Tab A 10.1 de 2019 es una buena prueba de ello – y su tope de gama no es una excepción: cuerpo de aluminio resistente y sobrio con esquinas redondeadas, resultando en un dispositivo ligero (pesa 60 gramos menos que su predecesora), bien compactado y manejable. La hemos usado tanto con funda como sin ella y su chasis ha soportado bien el día a día y las huellas.
Así, la Samsung Galaxy Tab S6 resulta cómoda con una sola mano e imperceptible si la llevamos dentro de un bolso. Samsung continúa limando milímetros a sus tabletas gracias a su buen trabajo de compactación. Así, logra que el ratio entre dimensiones y pantalla pase del 78,07% de que tenía la Tab S4 a un 81,93%, levemente superior a la de la Tab S5e.
De nuevo, frontal despejado de elementos más allá de la pantalla. La disposición de los botones en los bordes es la habitual en Samsung: en la derecha los del volumen y encendido, si bien esta vez el botón ON/OFF no es más grande ya que no integra el lector de huellas. Un poco más abajo, la ranura para tarjetas. A la izquierda encontramos unos pines (POGO) para conectar al teclado, ya que no se conecta mediante Bluetooth. Arriba y abajo los cuatro altavoces situados próximos a las esquinas. Finalmente, en el borde inferior un USB-C para cargarlo.
Una ausencia notable e inexplicable en la gama alta de las tabletas Samsung de este 2019: la toma jack 3,5 mm. Es comprensible que en un dispositivo como un teléfono se busque reducir el grosor al máximo porque va en el bolsillo, pero en una tableta la integración de un puerto jack es más útil que traumática a nivel de dimensiones y sobre todo, escenarios de uso.Samsung Galaxy Tab S6, análisis: así es la tablet más ambiciosa y completa de Samsung para este 2019
Samsung se olvida del 5 y salta de la Tab S4 a la Samsung Galaxy Galaxy Tab S6, el último y más completo tablet de la firma coreana. Esta generación llega con el reclamo de ser la tableta más productiva hasta la fecha Samsung y otros detalles poco comunes en este formato como el reconocimiento facial, el lector de huellas integrado en la pantalla o la doble cámara trasera. Hemos probado la tableta más premium de Samsung y esta es nuestra experiencia.
Ficha técnica de la Samsung Galaxy Tab S6
El salto de la Tab S4 a la Tab S6 tiene «trampa»: los coreanos han optado por una estrategia de diversificación con el lanzamiento de la Samsung Galaxy S5e de por medio, una tableta de gama media alta con alguna concesión en diseño y funcionamiento.
Samsung no ha escatimado en detalles para su buque insignia. A nivel de hardware esta tablet cuenta con una configuración de lo más potente del mercado Android en cuanto a procesador y RAM que busca ofrecer una gran experiencia tanto en ocio como en productividad con la carta de DeX en la manga. Para completar esta experiencia «pro», su característico S-Pen y un teclado (ojo, no incluido) con mejoras relevantes en cuanto a diseño y funcionalidad.
En cuanto a su pantalla, los coreanos siguen la estela de la Samsung Galaxy Tab S4 que tan buenos resultados ofreció, introduciendo mejoras leves pero conocidas, ya que sus especificaciones son idénticas a las de la Tab S5e: un panel AMOLED de 10,5 pulgadas con resolución Wide Quad Extended Graphics Array. Para redondear la experiencia audiovisual, le cuatro altavoces con tecnología AKG y Dolby Atmos con el objetivo de lograr un sonido envolvente.
Cambios notables en el terreno fotográfico. Samsung ha mejorado sus cámaras traseras con una configuración ambiciosa para este tipo de dispositivos, integrando un módulo dual compuesto por una principal ultra gran angular que alcanza los 123º acompañada por una segunda lente con un campo de visión de 80º. Sin novedades en la frontal.
En lo relativo a la batería, Samsung Galaxy Tab S6 repite las especificaciones de la Tab S5e en cuanto a la carga rápida y su capacidad, que es levemente inferior a los 7.300 mAh que llevaba la Tab S4, capaz de proporcionar una autonomía superior a las 12 horas. Habrá que ver en qué se traduce esta leve reducción, si bien los resultados de autonomía de su hermana pequeña nos invitan a ser optimistas gracias a la eficiencia de componentes y software.
Si en la Tab S4 el sistema biométrico de seguridad era el reconocimiento del iris y en la Tab S5e el sistema lo conformaba el reconocimiento facial y el lector de huellas en el lateral, con la Tab S6 Samsung repite el reconocimiento de rostros y replica a los teléfonos móviles integrando el lector digital en la pantalla.